Náutica Ereso, 100 años de historia náutica de Ibiza

La historia de nuestra familia, la familia Costa, forma parte de la historia del desarrollo náutico de Ibiza desde finales del siglo XIX. Una historia que va ligada al Club Náutico de Ibiza, que este año celebra también su centenario. Esta es la historia de como Ibiza pasó de vivir del mar a amarlo y disfrutarlo.

Dedicarse al mar a principios del siglo XX en Ibiza era una forma de vida dura, marcada por el aislamiento y el esfuerzo físico. La isla, aún alejada del turismo, vivía principalmente de la pesca, el comercio marítimo de pequeña escala
Ibiza dependía del mar para comunicarse con la península y con otras islas y el transporte de mercancías y pasajeros se hacía en barcos pequeños que tardaban días en llegar a destino. En este contexto, Francisco Costa Torres, abrió una pequeña tienda de suministros náuticos en el puerto de Ibiza. Era 1925 y ese fue el origen de una historia familiar que lleva ya 100 años ligada al mar.
De fareros a navegantes: el mar como destino
Francisco Costa Torres se formó como capitán de la marina mercante y recorrió el mundo gobernando buques como el María Formosa, que conectaba Bilbao con Southampton. Aunque su padre Juan Costa, había sido farero en Formentera y Almería, él quiso conocer el mar más allá del Mediterráneo.
Después de varios años recorriendo mundo, al llegar a Ibiza Francisco decidió quedarse. Se convirtió en el primer práctico del puerto de Ibiza y, en 1925, fundó la tienda de efectos navales que más tarde sería conocida como “El Monopolio”. En ella vendía pintura para barcos, combustible, cabos, accesorios… Era un punto de encuentro para marineros, pescadores y agricultores.
El nacimiento del Club Náutico de Ibiza
Ese mismo año, junto a otros amantes del mar, fundó el Club Náutico de Ibiza, siendo su primer Presidente y Presidente de Honor. El club fue un revulsivo social y deportivo para la isla en plena posguerra: organizó regatas, eventos sociales y excursiones de recreo a Formentera y puso en marcha una nueva forma de vivir el mar, no solo como sustento, sino como ocio y cultura.
Pioneros en navegar por placer
En los años 30 y 40, la familia Costa fue pionera en Ibiza en disfrutar del mar por placer. Se subieron al primer fueraborda de la isla, fabricaron sus propios kayaks de madera y compitieron en las primeras regatas de vela ligera.
En los años 60, Francisco Costa Colomar, hijo del fundador, llevó el negocio a otro nivel: trajo los primeros barcos de fibra de vidrio a Ibiza, representó marcas innovadoras y amplió el catálogo con neumáticas y motores fueraborda. Su participación en el Salón Náutico de Barcelona en 1963 supuso una revolución para la náutica ibicenca.
Turismo, modernización y nuevas generaciones
La llegada del turismo internacional y la apertura del aeropuerto en 1966 transformaron Ibiza… y también el negocio familiar. La náutica ya no era solo cosa de transporte de mercancía y de pescadores: cada vez más personas querían disfrutar del mar. En los años 80, Paco y Joan Costa (tercera generación) se incorporaron al negocio y mantuvieron viva la pasión por la vela. En los años 90 llegaron entonces marcas como Yamaha, Jeanneau o Sessa Marine. En el año 2000 se constituyó oficialmente Náutica Ereso S.L., iniciando una nueva etapa profesional que hoy está dirigida por la cuarta generación al frente, con Marc Costa.
Náutica Ereso es ahora un referente del sector a nivel nacional.
Ibiza, mar y familia: nuestro legado
Náutica Ereso no es solo una empresa. Es el reflejo de una forma de entender la vida y el mar. Es la historia de una familia que ha trabajado adaptándose a la evolución del ocio en el mar, a través de embarcaciones y accesorios náuticos pero también ahora iles de personas que han confiado en nosotros para cumplir su sueño de navegar.
Gracias por ser parte de esta historia.

